A propósito del discurso de Iñigo Errejon en la investidura de Ayuso a la Comunidad Autónoma de Madrid
Totalmente de acuerdo con tu discurso (Iñigo), lo aplaudo; pero me voy a permitir cuestionar algunos de los "principios éticos o valores" de esas clases "menos privilegiadas". Las desigualdades sociales son evidentes y abogo por mitigarlas, si pudiera ser...,mejor q desaparezcan , pero de momento no deja de ser utópico. Es de justicia y un valor intrínseco de nuestra sociedad, o debería de serlo, el que tod@s tengamos derecho a una sanidad, educación, justicia, seguridad, etc, gratuita e igualitaria; por descontado; derecho a las mismas oportunidades. (...) Pero que pasa con esa parte de la población que se ha "acostumbrado" a vivir de las ayudas sociales y a no "luchar por nada"?. No pueden haber más ofertas de trabajo que parados demandantes de empleo cobrando prestaciones sociales, es incongruente, insostenible. No puede haber rentas únicas a los 50 años ( que aún se es joven actualmente) por incapacidad para encontrar un puesto de trabajo y empresas que no sean capaces de cubrir sus plantillas porque no encuentran trabajadores. Hay una parte de la sociedad en edad productiva que solo aspira a contratos temporales de seis meses, o menos, que les permitan continuar cobrando las ayudas sin tener que desempeñar un puesto de trabajo. Debe haber más control, mucho más. "Si la sociedad te da también tienes que tener el compromiso de contribuir y de devolver, en la medida de lo posible, parte de lo que te han dado". La obligación debe ser bidireccional.
No se puede ocupar una vivienda ajena, se debe facilitar la adquisición o el alquiler de una, pero también hay que comprometerse a cuidarla como un bien propio, tanto si eres inquilino o propietario, muchas veces el problema no radica sólo en la especulación sino en este aspecto:" no cuidamos los bienes ajenos, los "destrozamos", y ésto genera mucha desconfianza."
Hay un aforismo que se utiliza mucho en la izquierda comunista (que conste que soy y siempre he sido de izquierdas) que dice: " de cada cual según su capacidad y a cada cual según su necesidad", creo que esto es muy injusto porque la necesidad de cada uno es altamente consecuencia, aunque no siempre, de nuestra responsabilidad e irresponsabilidad, por ejemplo...: ¿si alguien "destroza" su vida deliberadamente tengo siempre la obligación de mejorar la vida de esa persona que nunca fue capaz de cuidar de la suya?,¿ y si la mejoro tengo que empoderarla hasta situarla en el mismo plano de igualdad que tienen otros individuos que han sido mas responsables, e incluso más trabajadores que él o ella?. La solidaridad es una cualidad indispensable que debe tener cualquier sociedad, pero hay que controlar y no favorecer las conductas de esa parte de l@s individu@s que son incesantemente insolidar@s y se han acostumbrado a vivir a costa de los demás.
Las políticas sociales necesitan controles y educación , si no nos creemos que nacemos con el derecho de no hacer nada y vivir "parasitando' la colectividad. En las clases sociales menos favorecidas también hay mucho fraude y mucha picaresca,
Creo que desde que el ser humano no tuvo la necesidad de "doblar las lumbares " para buscarse su sustento, se "imbecilizó," comenzó con problemas psicológicos, y se acostumbró a que le llevarán la 'cuchara a la boca". Ya vimos y se han estudiado esas conductas en las clases aristocráticas de épocas anteriores, donde l@s individuos que no tenían nada que hacer desarrollaban conductas antisociales, egocéntricas y perniciosas. La falta de iniciativa, la inactividad, el "exceso de bienestar" y una vida "licenciosa" está creando un nuevo ' individuo' que adolece de motivación, de ambición y de empatía.
Muchas de los efectos que producen las "pastillas de la felicidad" se pueden conseguir de manera natural con una practica habitual deportiva, la lectura de un libro, escuchando música, participado en una buena tertulia, haciendo el amor, consiguiendo retos, trabajando..., "a grosso modo", con una existencia que nos haga "poner vida a los años y no años a la vida". Por descontado, también está la otra clase deplorable y deleznable de individu@ que solo es feliz amontonando dinero y poder a costa de "someter" a los demás..Quiere un palacio rodeado de chozas con "choceros" que le rindan pleitesia y, los "hilos" de la sociedad para moverla a su gusto. Hay muchas clases de esclavitud.
Es aberrante que una parte ínfima de la humanidad viva en el lujo, el derroche y la opulencia y, una inmensa mayoría no disponga de agua potable ni de alimentos diariamente...; clarom, que en este caso si tu país tiene petroleo provocamos un golpe de estado y "aquí paz y allí gloria". Y para cuando no tenemos nada que decir y somos incapaces de argumentar los embates que nos propina la izquierda opositora pues ya tenemos a Venezuela o a Cuba. No es en la Comunidad Autónoma venezolana o cubana donde hemos ganado la investidura, Sra, Ayuso?, escuchándola me doy cuenta de lo poco que le importa España y menos, Madrid.
Arreglamos el "mundo" o nos lo comemos?
Muchas de los efectos que producen las "pastillas de la felicidad" se pueden conseguir de manera natural con una practica habitual deportiva, la lectura de un libro, escuchando música, participado en una buena tertulia, haciendo el amor, consiguiendo retos, trabajando..., "a grosso modo", con una existencia que nos haga "poner vida a los años y no años a la vida". Por descontado, también está la otra clase deplorable y deleznable de individu@ que solo es feliz amontonando dinero y poder a costa de "someter" a los demás..Quiere un palacio rodeado de chozas con "choceros" que le rindan pleitesia y, los "hilos" de la sociedad para moverla a su gusto. Hay muchas clases de esclavitud.
Es aberrante que una parte ínfima de la humanidad viva en el lujo, el derroche y la opulencia y, una inmensa mayoría no disponga de agua potable ni de alimentos diariamente...; clarom, que en este caso si tu país tiene petroleo provocamos un golpe de estado y "aquí paz y allí gloria". Y para cuando no tenemos nada que decir y somos incapaces de argumentar los embates que nos propina la izquierda opositora pues ya tenemos a Venezuela o a Cuba. No es en la Comunidad Autónoma venezolana o cubana donde hemos ganado la investidura, Sra, Ayuso?, escuchándola me doy cuenta de lo poco que le importa España y menos, Madrid.
Arreglamos el "mundo" o nos lo comemos?